Aunque los gestores de la industria turística lo aseguren
Desde los primeros momentos de esta democracia – que es papel mojado en nuestra Carta Magna – todos los altos cargos – desde ministros a concejales municipales del turismo – ayudados por intereses ocultos de empresarios, sindicatos y todo tipo de agrupaciones y asociaciones, han manipulado las cifras de la actividad turística de nuestro país, a fin de colgarse medallas y presumir de su “gran gestión”, y así medrar y seguir ocupando puestos políticos.
Muy pocos casos se han dado entre esta tropa, que hayan trabajado en este campo con seriedad, dignidad y decencia. Y es que, la denominada primera industria nacional, hábilmente manipulada, favorece la obtención de votos y “reconocimientos” contando con unas cifras difícilmente demostrables.
El Instituto Nacional de Estadística es una formidable arma propagandística, si el político de turno sabe controlarlo y presenta cifras que demuestran sus “verdades”, con lo que todos los resultados favorables pasan a ser verdad., según convenga a quien puede manejarlo.
Así, hasta el año 2010, nuestra industria podía suponer un 12% del PIB español, lo que era un capítulo económico de primer orden en la economía española. Con la llegada de la crisis la caída ha sido estrepitosa, superando difícilmente el 10%. A esta crisis global se han unido problemas de otro tipo. Por ejemplo, las guerras, riesgos y problemas de seguridad, en zonas cercanas a nuestro país, que han hecho que muchos turistas desviasen sus viajes hacia otras zonas geográficas separadas de nuestro ámbito.
Las economías de los viajeros que llegaban habitualmente a nuestro país, han sufrido recesiones importantes lo que ha supuesto que hayan disminuido sus viajes a España y, en todo caso, si han venido a nuestro país, lo han hecho gastando muy poco, y con ofertas desde sus países a precios de bajo coste.
Solamente nos ha salvado en algunas ocasiones, el desvío de habituales clientes nuestros que han seguido viniendo a España, por guerras y problemas de seguridad en países concretos y que han ido desapareciendo recientemente.
Países como Túnez o Marruecos, incluso Egipto últimamente y Turquía, han mantenido el flujo de llegadas de muchos turistas a sus destinos que, habitualmente venían a España y que por una subida de precios inadmisible, dejaron de llegar desde el año 2010 y que está siendo muy difícil recuperar, dado que problemas serios en nuestro sector turístico, han hecho cambiar la decisión de viajar a España.
Por muchas falsedades que se digan alrededor del sector, la crisis económica ha machacado al sector turístico español y así lo aseguran los empresarios serios, que no ocultan la realidad, para granjearse la amistad de políticos indecentes que buscan votos electorales y manipulan la realidad.
España se ha convertido en un destino turístico degradado, con fama de servicios de baja calidad, instalaciones muy antiguas que necesitan urgente remodelación y, en suma, en un destino para pobres o clientes de baja posibilidad económica.
Aunque en otro Pregón podemos dar datos concretos sobre este asunto, a la Costa Brava y a Mallorca, llegan vuelos charter por menos de 50 euros, ida y vuelta, desde países como el Reino Unido, con “originales clientes” que pasan un fin de semana sin alojamiento y buscando – y encontrando – una permanente borrachera, siendo devueltos a sus países por esa cantidad, y dejando, además de poco dinero, auténticas tropelías en el mobiliario urbano.
De todo esto podremos dar datos en otra ocasión, aunque no descubrimos nada nuevo, ya que numerosos medios de comunicación han ofrecido imágenes que hablan por si solas.
Faustino Castilla
Escritor, periodista e historiador
