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Volodos aborda a Brahms y Schubert en el ciclo Grandes Intérpretes y ofrecerá una clase magistral

  • Este soberbio músico es, a la vez, un virtuoso del más alto nivel” THE GUARDIAN
  • Vivimos una época que va en contra de la música clásica, porque para tocarla hay que estar en silencio. La verdadera esencia de la música clásica es el silencio” ARKADI VOLODOS

El intérprete ruso, Arkadi Volodos, actúa el 15 de marzo en la 21ª temporada del ciclo Grandes Intérpretes de Scherzo con un recital en el  Auditorio Nacional de Música en el que abordará obras de Brahms y Schubert. El pianista ofrecerá además el 17 de marzo una clase magistral en el Real Conservatorio Superior de Música, abierta a todos los públicos.

Volodos ya ha pasado por este mismo escenario, dentro del ciclo que organiza la Fundación Scherzo, en otras ocasiones. La última tuvo lugar en 2013. La presente edición, que inauguró el pasado 2 de febrero Ivo Pogorelich, incluye 11 recitales, además de tres clases magistrales abiertas al público a cargo del propio Volodos, Paul Lewis y Till Fellner. El próximo concierto, que tendrá lugar el 5 de abril, contará con la actuación de Grigori Sokolov.

La clase magistral que ofrecerá el célebre pianista tendrá lugar el 17 de marzo, a las 18 horas, en el Real Conservatorio Superior de la Música (calle Calle Doctor Mata, 2) y se centrará en los alumnos del centro y los de la Escuela Superior de Música Reina Sofía. Pero el acto estará abierto a todo el público, así como a músicos interesados.

Volodos (San Petersburgo, 1972) es, sin duda alguna, uno de los pianistas actuales más destacados e importantes. Su virtuosismo y su técnica al teclado le han encumbrado como uno de los músicos de referencia, a pesar de que dosifica sus actuaciones, con alrededor de medio centenar de recitales al año. Entre concierto y concierto, el intérprete ruso deja reposar las notas y reflexiona sobre su trabajo. De ahí que afirme que el silencio es una parte esencial de su arte. Desde que llegara a Madrid, a mediados de los noventa, para estudiar bajo el mando de Dimitri Bashkhirov, Volodos mantiene una estrecha relación con España. De hecho, su último álbum está dedicado al compositor catalán Federico Mompou, un disco que cuenta con alguna transcripción suya.

Volodos comenzó estudiando canto y dirección. Pero fue en 1987 cuando tomó en firme la opción del aprendizaje del piano. Pasó por el Conservatorio de San Petersburgo y continuó su formación en París junto a Jacques Rouvier. En la Escuela Superior de Música Reina Sofía, el destacado pianista fue instruido por Bashkhirov, quien se centró a conciencia en la preparación del que ha sido bautizado como el Horowitz del siglo XXI.

En 1996 debutó en Nueva York. A partir de entonces, Volodos ha ofrecido recitales por todo el mundo junto a las orquestas más importantes, entre ellas, la Filarmónica de Berlín, la de Israel, la Philharmonia, Royal Concertgebouw, la Filarmónica de Munich, Dresden Staatskapelle, la Sinfónica de Boston o la Sinfónica de Chicago. Todas ellas dirigidas por artistas de la talla de Myung-Whun Chung, Lorin Maazel, Valery Gergiev, James Levine, Zubin Mehta, Seiji Ozawa, Jukka-Pekka Saraste, Semyon Bychkov o Riccardo Chailly. Con frecuencia, Volodos actúa en el Carnegie Hall de Nueva York, la Pilharmonie de Berlín, Musikverein de Viena y el Théâtre des Champs-Elysées de París; así como en otras salas de prestigio en Europa, Estados unidos y Japón.

Desde 1998, el sello Sony Classical publica sus actuaciones, dentro de un catálogo que incluye recitales con las Sonatas de Schubert u obras de Rachmaninov, además de actuaciones en directo con la Filarmónica de Berlín, bajo la dirección de James Levine o el Primer Concierto de Piano de Tchaikovsky, bajo la dirección de Seiji Ozawa. Su disco Volodos plays Liszt fue nombrado Editor’s Choice por la revista Gramophone. Consiguió, asimismo, un Diapasón d’Or y el premio ECHO-Klassik. En 2010, Gramophone destacó el CD que recogía su recital en Musikverein como el mejor disco instrumental del año.

En esta última etapa, el aclamado pianista ruso ha dedicado buena parte de sus conciertos a Federico Mompou –Volodos plays Mompou (2013)- que recibió numerosos premios en Francia, Alemania y Reino Unido, como de nuevo el Diapason d’Or, Choc de Clásica, Echo Klassik 2014 y un Gramophone Award. Hace dos temporadas también acompañó a la Sinfónica de Dinamarca en su gira por España, ofreciendo recitales en Zaragoza, Madrid, Vitoria y Valencia.

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